Hace unos días lanzamos una noticia, firmada por Lluís Manent, de Takiwasi, que se hacía eco de un supuesto estudio del Instituto Pasteur de París, en el que se insinuaba que la nicotina ayuda a prevenir el contagio del Covid-19.

Sobre todo se hablaba del uso del RAPÉ y en líquido por la nariz según usos tradicionales amazónicos.

Inmediatamente surgió una campaña mundial para desacreditar está información al entender que podría tratarse de una incitación a fumar al confundir el acto de fumar asociado al vicio con el consumo terapéutico o en ámbitos chamánicos.

El uso del tabaco como planta de poder es común en muchas tradiciones amazónicas, andinas y espirituales, como la del Camino Rojo, dónde se consagra ceremonialmente.

Aquí os dejo un artículo elaborado por los compañeros de la Plataforma para la Defensa de la Ayahuasca (PLANTAFORMA) Sobre el tema.