Lo que nos temíamos está ya pasando. El avance del virus, que parece estabilizarse en Europa, está tomando carrerilla en las zonas más aisladas de la Amazonia.

Los indígenas están pidiendo ayuda desesperada porque allí no cuentan con los recursos, sistema sanitario ni la organización para encarar este desastre. Y su inmunidad ante este tipo de enfermedad es más baja que la nuestra.

La lucha se traslada allí. Entre varios grupos de apoyo a la Amazonia estamos preparando una campaña de ayuda para mandar recursos.

Seguimos atentos…